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Si estás aquí, seguramente es porque te gusta más un buen misterio que un buen vino… ¡ay, perdón! digo que te gusta tanto como un buen vino. Y eso te hace de los míos, de los que nos encanta la última página en la que se desvela el misterio tanto como el último bocado de una deliciosa comida.
Pero si estás aquí, es porque quieres saber quién soy yo.
Soy Erika Rivera Bravo y nací en México hace ya un rato. Aprendí a leer muy pronto y prefería vagar por los salones de mi escuela en busca de libros nuevos que correr tras cualquier pelota. Cuando descubrí la biblioteca me dio por deslizarme dentro en cuanto tenía un rato libre, aunque nunca recordaba cerrar la puerta, lo que dejaba una pista clara de dónde había estado.
Estudié Relaciones Internacionales y mientras estudiaba la política internacional del momento, escribía cuentos y poemas en cualquier pedazo de papel que cayera en mis manos. Una costumbre que aún mantengo, así que no hay servilleta o ticket que esté a salvo cuando me da por hacer anotaciones.
En 2006 me casé con un ingeniero y nos lanzamos a la aventura de vivir en Madrid. Y desde luego, lo primero que hice fue sacar el carnet de las bibliotecas más cercanas. Cuando volvimos a México en 2007 hacía ya varios años que la novela me rondaba por la cabeza, pero tuvieron que pasar más de diez años para que finalmente me atreviera a publicar “El Misterio de los Ocho Pétalo” (2020), un thriller histórico con pinceladas de gastronomía que tuvo una mejor acogida entre los lectores de la que yo misma me hubiera atrevido a imaginar.
En 2019 participé en la antología “16 Historias Intrascendentes” (editorial Lugar Común) y en 2021 tuve el honor de publicar tres cuentos en “Miradas a otros mundos, lo prehispánico y lo virreinal desde la minificción de autoras mexicanas” (editorial Quark).
Y en 2022 publiqué “Mantequilla, champaña y otros antojos para fiestas, fantasmas y funerales”, un libro de relatos que nació como un ejercicio creativo.
Fui profesora de Historia durante casi una década y me encanta poder hablar de Historia e imaginar qué hay detrás de cada acontecimiento histórico.
Actualmente escribo relatos y thrillers históricos, siempre con una buena pincelada de gastronomía e Historia, colaboro con el Centro de Escritura del Tec de Monterrey y soy parte del grupo de escritoras “Las Escobas”.
